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Ana Bernal Santos y Marta García Salguero, elegidas choqueras mayor e infantil de Huelva entre las diez aspirantes al título Juan Franco de Orta recibe la Insignia de Oro
En la carpa de Juan el Pati, concurrida y con el animado ambiente que habitualmente registra durante las noches de concurso, autores, directores y componentes de distintas agrupaciones del Carnaval colombino entonaron ayer su particular declaración de intenciones a ritmo de un pasodoble de Ay, qué caló: Dicen que soy un payaso/porque me disfrazo/ y salgo en Carnaval./Dicen que soy un idiota/y un cabeza loca/que estoy loco de atar (...)/ Prefiero ser un payaso cada febrero/a ser un payaso/to el año entero.
La infraestructura, que se trasladó de los aledaños del Gran Teatro al mismísimo escenario de la bombonera, fue el marco elegido por Emilio Gutiérrez Rebollo -con el disfraz de la comparsa La Final (la última en la que ha cantado)- para pregonar un Carnaval en el que, según dijo, hay que "hacer un apuesta clara y decidida por la cantera, dotándola de medios, ya sea a través de una auténtica escuela de carnaval o a través de peñas intantiles como los Peques".
Tras ser presentado por el edil de Cultura, Manuel Remesal, el pregonero -autor, componente de agrupaciones, Insignia de Oro y ex presidente de la Federación Onubense de Peñas y Asociaciones de Carnaval (Fopac)- recorrió sus más de 25 años vinculado a esta popular fiesta y aseguró recordar "con gran afecto" su primer disfraz, un atuendo de pingüino algo ajustado.
Aquel vital episodio ocurrió en su querida Isla Cristina, de donde era su padre, en la cabalgata de 1980. Desde entonces, este carnavalero ha vibrado con una fiesta que se ha convertido en parte esencial de su vida y que, año tras año, ha sido su particular plataforma para cantarle a Huelva "desde la chirigota, desde la comparsa y desde el cuarteto".
Los Ciquitraques, con el pasodoble de Dos Amantes De nuevo un año más, y la sentida intervención de Javier Tejada, que cantó un pasodoble dedicado a Juan López Cerezo, fueron dos de los momentos más entrañables del pregón, antesala de un nuevo Carnaval en la que actuaron el cantautor moguereño Nicolás Capelo y el grupo onubense Och8 Vientos, que en la primera parte de la gala recogió los aplausos del respetable.
Previamente se dio a conocer la identidad de las choqueras mayor e infantil, toda vez que por el escenario del Gran Teatro desfilaron y bailaron, a ritmo de Bollywood, las diez aspirantes: Nazaret Cabello Arias, Lucía Cárdenas Castro, Marta García Salguero, Lucía Salguero Díaz y Carla Suárez Martín (candidatas infantiles) y Rocío Arenas Muñoz, Ana María Bernal Santos, Paula Fernández Medel, Alba del Rocío Moreno Fernández y Miryam Moreno Rouco (candidatas adultas).
Todas ellas fueron presentadas por un particular Tagore (encarnado por Federico Pérez), que con el Taj Mahal de fondo recordó que muchas de sus obras fueron traducidas al español por Zenobia Camprubí, secundada por su marido, el Nobel moguereño Juan Ramón Jiménez.
El alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez, coronó a la Ana Bernal Santos, mientras que Marta García Salguero recibió los honores en su categoría. Además, el presidente de la Fopac, Antonio Hierro, entregó la Insignia de Oro de la federación a Juan Franco de Orta, el carnavalero conocido en su peña como el tito Juan.
La infraestructura, que se trasladó de los aledaños del Gran Teatro al mismísimo escenario de la bombonera, fue el marco elegido por Emilio Gutiérrez Rebollo -con el disfraz de la comparsa La Final (la última en la que ha cantado)- para pregonar un Carnaval en el que, según dijo, hay que "hacer un apuesta clara y decidida por la cantera, dotándola de medios, ya sea a través de una auténtica escuela de carnaval o a través de peñas intantiles como los Peques".
Tras ser presentado por el edil de Cultura, Manuel Remesal, el pregonero -autor, componente de agrupaciones, Insignia de Oro y ex presidente de la Federación Onubense de Peñas y Asociaciones de Carnaval (Fopac)- recorrió sus más de 25 años vinculado a esta popular fiesta y aseguró recordar "con gran afecto" su primer disfraz, un atuendo de pingüino algo ajustado.
Aquel vital episodio ocurrió en su querida Isla Cristina, de donde era su padre, en la cabalgata de 1980. Desde entonces, este carnavalero ha vibrado con una fiesta que se ha convertido en parte esencial de su vida y que, año tras año, ha sido su particular plataforma para cantarle a Huelva "desde la chirigota, desde la comparsa y desde el cuarteto".
Los Ciquitraques, con el pasodoble de Dos Amantes De nuevo un año más, y la sentida intervención de Javier Tejada, que cantó un pasodoble dedicado a Juan López Cerezo, fueron dos de los momentos más entrañables del pregón, antesala de un nuevo Carnaval en la que actuaron el cantautor moguereño Nicolás Capelo y el grupo onubense Och8 Vientos, que en la primera parte de la gala recogió los aplausos del respetable.
Previamente se dio a conocer la identidad de las choqueras mayor e infantil, toda vez que por el escenario del Gran Teatro desfilaron y bailaron, a ritmo de Bollywood, las diez aspirantes: Nazaret Cabello Arias, Lucía Cárdenas Castro, Marta García Salguero, Lucía Salguero Díaz y Carla Suárez Martín (candidatas infantiles) y Rocío Arenas Muñoz, Ana María Bernal Santos, Paula Fernández Medel, Alba del Rocío Moreno Fernández y Miryam Moreno Rouco (candidatas adultas).
Todas ellas fueron presentadas por un particular Tagore (encarnado por Federico Pérez), que con el Taj Mahal de fondo recordó que muchas de sus obras fueron traducidas al español por Zenobia Camprubí, secundada por su marido, el Nobel moguereño Juan Ramón Jiménez.
El alcalde de Huelva, Pedro Rodríguez, coronó a la Ana Bernal Santos, mientras que Marta García Salguero recibió los honores en su categoría. Además, el presidente de la Fopac, Antonio Hierro, entregó la Insignia de Oro de la federación a Juan Franco de Orta, el carnavalero conocido en su peña como el tito Juan.
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